El proyecto esposa. Graeme Simsion

La encargada de elegir y
presentar esta novela fue Angelina Martínez, licenciada en Historia del Arte,
funcionaria en la JCYL y gran lectora; Angelina no es profesora, no ha cursado
un Grado de literatura en la universidad y no está vinculada profesionalmente
al mundo literario, lo que la convierte en la perfecta invitada, porque la
elección del libro, su presentación y comentario se hallan alejados de ciertas prevenciones
que presentan las personas relacionadas directamente con la literatura. Y
comenzó señalando que, como sucede en muchas ocasiones, le hablaron de esta
novela de la que carecía de referencias previas y de ahí su elección; le gustó
y por ello la trajo ayer a debate de los lectores. Además de señalar que es una
novela vitalista, alegre y con dosis de humor, fue interesante su reflexión
acerca de dos procesos de lectura: una primera rápida únicamente de disfrute y
ya en la relectura es cuando pudo apreciar elementos y matices que le habían
pasado desapercibidos en la primera.

              Graeme
Simsion
es un escritor australiano muy leído en su entorno y menos conocido en
España; después de vender su empresa de informática para dedicarse en exclusiva
a la escritura, ha conocido el éxito a través de la novela que hoy comentamos, El proyecto esposa, y su continuación, El efecto matrimonio. El protagonista
Don Tillman es un profesor de Genética
con ciertas peculiaridades en su forma de vivir y de relacionarse con
los demás que a sus 39 años decide encontrar esposa y comienza la búsqueda de
la que considera que sería su pareja ideal diseñando un cuestionario:

En el reino animal, no tendría ninguna
dificultad para aparearme, pero en el humano, nunca he logrado tener una
segunda cita con la misma mujer. Los motivos de mi fracaso no termino de
entenderlos, y como las estadísticas muestran que los hombres casados son, en
promedio, más felices y viven más tiempo, he decidido poner en marcha un
programa vital para mí, el Proyecto Esposa. A tal fin, he creado un algoritmo
perfecto que me permitirá excluir las candidatas inadecuadas: las fumadoras,
las impuntuales, las desorganizadas, las que dedican demasiado tiempo a su
aspecto exterior… en suma, todas aquellas que no respondan a los estrictos
criterios que se exponen en el cuestionario de dieciséis páginas que he
elaborado.

              Aparece
entonces en su vida Rosie Jarman, guapa, lista, que trabaja en un bar y que no
cumple varios de los requisitos básicos de su cuestionario, pues bebe, fuma y
se tiñe el pelo. Rosie se ha criado junto a su padrastro y fallecida su madre
desea conocer la identidad de su verdadero padre, pues nunca lo supo por boca
de su madre. Comienza entonces el proyecto padre ayudada por Don. A partir de
ese momento la búsqueda del padre de Rosie se convertirá en el objetivo de Don,
afianzando la creciente amistad e intimidad entre ambos, hasta cumplir también
por esta vía el proyecto esposa. La novela, alegre, divertida y muy optimista,
demuestra en último caso la posibilidad de hallar el amor allí donde no se
espera y de conseguir aquello que se busca aunque por caminos distintos a los
proyectados.

              Nuestro
comentario discurrió por caminos distintos a los que el libro aparentemente
marcaba, pues lejos de insistir en el tono optimista por el que discurre su
acción, los participantes se centraron en la incapacidad del protagonista para
sentir cierta empatía, su egoísmo y dificultad para interactuar en sociedad,
resaltando que el caso de Don es un caso de autismo, o de asperger, que
tampoco le pusimos nombre exacto a sus carencias. El personaje se muestra a los
ojos del lector demasiado amable, considerando su rigidez y lo difícil que
puede llegar a ser en la vida real convivir con este tipo de personas. Por
ello, alejamos las cuestiones románticas del libro para insistir en el
“buenismo” que rodea esta historia, puesto que en la novela todo es amable, distendido
y fácil con buena dosis de novela rosa que la hace inverosímil, dado el
carácter del protagonista:

He abandonado el Sistema
Estandarizado de Comidas. He borrado el treinta y ocho por ciento de mi
programa semanal, horas de sueño excluidas. He tirado todas mis camisetas
viejas. He eliminado todas las cosas que no te gustaban. No descarto futuros
cambios
.

              Con
todo, y aunque ese happy end con que
finaliza la novela, a algunos pareció excesivo, sí hubo tiempo para señalar las
virtudes de una novela que no persigue sino entretener como es el humor, lo
hilarante de alguna de las situaciones, las reflexiones siempre interesantes en
torno a temas presentes en la obra como la genética, el autismo, el
cuestionamiento científico, el sistema universitario en el que Don trabaja, la
crítica a determinados profesionales como los médicos, la sexualidad, la
educación y algunos otros que hacen de las páginas de Simsion algo más que una
novela romántica porque entre sus páginas hay reflexión inteligente.

              Las
palabras con las que Angelina comenzó su intervención fueron corroboradas
porque El proyecto esposa hace reír,
descongestiona de tanta tristeza leída y en definitiva, hace al lector pasar un
rato amable y distendido. Y la literatura también está para eso, en este caso
casi una terapia frente al pesimismo. Gracias por ello a nuestra invitada
porque ayer, gracias a la elección de esta novela, sin darnos cuenta, también
se nos escapó la risa, y pocas veces las historias elegidas lo han conseguido.

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